CITA INELUDIBLE. LA CURA. AZOGADO
He etiquetado la entrada por primera y última vez como LGTBIQ+. El fin del necesario uso de las etiquetas significará el comienzo de la aceptación de la diversidad humana.
CITA INELUDIBLE
Empezó el bingo con los números 27, 30, 2, 81: Craig miró risueño la silla contigua. Barnaby —desde su urna eco'— devolvió la sonrisa a su marido.
LA CURA
«Esa lo que necesita es que le metan una buena polla en el coño. Veríais como así se le pasaba…».
Un aguacero implacable la había obligado a desoír el anacrónico consejo de su madre: Nunca entres en un bar. Busca cafeterías...
Llevabas un rato junto a la mesa más próxima a la puerta. El café humeante y el frío polar; ambos antagonistas te resarcían, por arte de magia, de una jornada incalificable, hasta que la palabra bollera te hizo prestar atención a las voces de la barra. Un grupo heterogéneo de hombres chismorreaba entre carcajadas sobre «la tetona» del súper'. Eras nueva en el lugar, pero vieja en el mundo. Aquellas malditas frases no te eran y, por un instante, volviste a avergonzarte de ser mujer, de ser heterosexual y de ser una cobarde. Todo esto rasgó tu mente al tiempo que te colgabas la pesada cartera y, abrigo en mano, salías a la calle con la esperanza de que el bendito diluvio borrase de tu piel la podredumbre de aquella humanidad.
AZOGADO