RITUAL VOTIVO

 

Canto de andar, Luar Na Lubre

Juntos montaban a orillas de un infinito turquesa, todas las mañanas de todos los días desde que se amancebaron... Al alborear, cabalgaban al paso disfrutando del áureo balanceo del otro; bajo el primer rayo, al trote, y reír cada nueva travesura; al galope, en el clímax del nuevo amanecer, embebidos en la salvaje espuma eyectada por las olas. A la postre, conmovido el dios de la mar y de los caballos, les ofreció inmortalizar aquella límpida devoción bajo las aguas salinas. Las Moiras, enojadas por la injerencia de Poseidón, dieron por concluida la labor y cercenaron los hilos de la pareja, mas la ninfa Tetis, prevenida, obró la transformación y los tres se sumergieron en las corrientes del reino marino felices por siempre.